Delectura

1793 Niklas Natt och Dag

Estocolmo tras el asesinato del Rey Gustavo III. En 1793 la capital sueca es un lugar observado bajo la atenta mirada del absolutismo temeroso de la traición a la monarquía y la revolución republicana que se extiende por Europa. Como en una ruleta manipulada, la vida gira sin ningún valor, la suerte se presenta en forma de una existencia sin tortura y la fortuna es una muerte plácida. Una realidad en la que el infierno, esa oscuridad donde lo que queda del alma es obligada a recordar y revivir un camino hacia la tumba lleno de terror y de dolor, parece ser el irremediable final de hombres, mujeres y niños por igual.

1793 es la expresión de un mundo atroz. Tan cruda y despiadada, es una novela poética. Tiene un argumento criminal impecable, sumergido en una trama de misterio impenetrable; el ritmo de una investigación policíaca paciente; personajes infames y heroicos; y acontecimientos que se construyen magistralmente desde la épica de la novela histórica.

Con cada página, entre los olores de las tabernas, la podredumbre de los callejones y el tufo que desprenden los burdeles infectos, se te impregna el aroma del miedo, el perfume de la muerte y la fragancia del diablo. Soldados, comerciantes y capitanes de barco corruptos y endeudados colorean la ciudad rodeada de un mar de vagabundos, mendigos y pordioseros harapientos y embriagados. Esas sombras, privadas de luz por el hambre, la enfermedad y la guerra; y de toda razón por la avaricia y la envidia, buscan la manera de sobrevivir en la ciudad saboreando cada gota de placer a costa de perder el alma.

En 1793, un montón de malnacidos que no escogieron origen ni destino ni herencia son obligados a ejecutar los pecados más abominables. Horrores tan grandes que es preferible estar borracho a sobrio para que las imágenes de la realidad se mantengan borrosas, como en una pesadilla.

Asesinos de corte codiciosos, plebeyos miserables y nobles intrigantes a merced de la sed de poder subsisten libres de culpa. Las conspiraciones contra el príncipe de la corona emponzoñadas por rumores y habladurías de un pueblo descontento por un juego de lealtades absolutas al régimen aniquilan cualquier esperanza.

Las multitudes agitadas piden sangre y bajo el pretexto de la expiación, exigen que el juicio y el castigo sean más brutales que el crimen cometido. Soga y decapitación son el natural entretenimiento de la turba.

Nada de lo que se pueda contar hará justicia a esta soberbia novela (por espléndida) que dibuja excepcionalmente un mundo de perversiones en un ambiente de turbulencia.

En este paisaje perturbador, aparece un cadáver flotando en la orilla pantanosa del lago en Södermalm. Dos fantasmas, Cecil Winge y Mickel Cardell, indagan sobre algo más que la autoría de un crimen. En la isla del sur nadie está solo ante la miseria, ni siquiera el cuerpo mutilado de un completo desconocido. Ambos seguirán el rastro de un caso inusual en lo que será una misión vital contra un tiempo traicionero.

Cecil Winge sostiene entre sus manos la llama que ilumina la oscuridad en el abismo. “El Fantasma de la Indebetou” es un abogado idealista defensor de sus convicciones, un hombre frío que no comete errores. Un maestro de la argumentación lógica y de la comprensión del crimen como respuesta al asco y la monstruosidad que muestra la humanidad sobre la humanidad. Un hombre tranquilo ante la presencia de la muerte que cree que cada cosa tiene su lugar y una función. Y que ambas son necesarias para que el mundo siga su trayectoria, funcionando con la eficacia de un reloj.

Mickel Cardell es un veterano de guerra lisiado que sufre del dolor fantasma del recuerdo de sus muertos. Las voces en el viento de compañeros ahogados en fragatas pidiendo compañía. Un calvario que alimenta una rabia esculpida sobre el honor de la batalla y el respeto al código. También es un borracho descreído que ejerce de guardia en La Reserva con osadía. Un valiente guiado por el menosprecio hacia su vida.

Winge y Cardell son lobo y vigilante, hartos de tristeza y libres de remordimientos, no luchan contra los hombres sino contra su falta de compasión. En su amistad, una grieta en la coraza por la que los peligros encuentran su entrada, derrota y victoria comparten el mismo espacio.

En esta cacería clandestina, Winge y Cardell se cruzarán con el relato epistolar del joven Kristofer Blix, que sueña con descansar de una agonía forzada en un rincón donde el espanto no consuma su espíritu, donde la aflicción no enturbie su alma. Con la única esperanza de morir pronto y dejar de ver y causar maldad. Con la última ilusión de reposar en un hoyo bien oscuro donde tan solo permanezca el olvido de su infortunio.

Se unirá a esta odisea la fuerza de los episodios feroces de Anna Stina, una joven que se rebela ante los hombres que atormentan a las mujeres tan solo por diversión, con el apoyo de una ley creada para excitación de jueces, curas y alcaides en su uso del mazo, la cruz y el garrote. Una desdichada que ignora su destino como hiladora encogida y encorvada llena de úlceras y llagas a medio curar, que huye de los guardias de azul, los Sangre de Cerdo, que solo sirven para cazar vagabundos, ladronzuelos y prostitutas por encargo de un pastor.

Esta es también la historia de las mariposas nocturnas como Karin Ersson o Johanna que vuelan creyendo que un día bailaran entre perlas y barones. Estas criaturas enloquecidas por el temor que se arrastran entre gritos, entonando el gemido de la súplica al parar los latigazos te arrancarán un aullido. Estas mujeres abandonadas por la carne y donde solo quedan los huesos, se desfiguran. Y entonces te quedarás sin aliento. Marchitas en su interior, el cuerpo se tambalea, y frágiles, desaparecen sin que nadie sepa dónde van. Y ahí, necesitarás hacer un silencio.

En este mapa de la ciudad entre puentes, los riachuelos apestan a muerte y arrastran los residuos putrefactos de la vanidad, la superstición, el servilismo y la adulación hacia las barracas donde viven las familias amontonadas que intentan resguardarse del frío y de la malignidad de la pobreza.

Esta novela es una lista de los demonios que ven y beben el delirio del infierno. Los Benevolentes y Las Furias de una ciudad que ayuda a quien nada necesita y no hace nada por quien lo necesita todo.

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Comentarios publicados

Me leí este libro hace un par de meses… Y googleando he aterrizado aquí.

¿Qué decir? Me impactó su oscuridad y violencia, y como una droga me hice adicta a cada una de sus páginas. Muy bien escrito y de lectura fácil.

No temáis, que al final de la oscuridad siempre queda lugar para la esperanza.

Y solo añadiré que de momento para mi es el libro del año…

María Elena

IM-PREEE-SIOOO-NAAAAN-TEEEE ¿¿¿Para cuando la segunda parte??? ¡¡¡Una novela bruuuutaaaaal!!! Si no sabéis qué libro regalar, ya lo tenéis más que fácil :)

Nelson D.F.

Me lo recomendó un amigo muy fan de los thrillers históricos. ¿Así pues, merece la pena?

Martha de Lugo

Ves per on una persona molt especial m’ha recomanat aquest llibre «1793. El llop i el vigilant». Amb moltíssimes ganes de començar-lo ben aviat i gaudir-lo tan com vosaltres!!!

David O.

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